El marketing de afiliación es un tipo de marketing bastante antiguo, pero que da fantásticos resultados ya que anima a más usuarios a participar del sistema. Básicamente consiste en vender productos de otras empresas por Internet.
Aprovechar esta técnica, junto a otras, puede ayudarnos a generar un crecimiento espectacular en pocos meses. No obstante, no podemos confundir el marketing de afiliación con el marketing de referidos, ya que no tiene nada que ver: uno se encarga de repartir un «beneficio» y el otro de conseguir nuevos clientes a través de la referencia de unos a otros.
Para conocer cómo funciona el marketing de afiliación, sigue leyendo para ver cómo puedes implementarla para hacer crecer tu negocio.
El marketing de afiliación: asociarte con otros para obtener un beneficio mutuo
El marketing de afiliación utiliza una técnica antigua pero eficaz: la venta de un producto a través de una plataforma y el afiliado que utiliza un determinado enlace o vía para canalizar el producto.
De completarse la venta del mismo, el afiliado recibe una comisión. Afiliado y mayorista hacen «la guerra» por su cuenta. El afiliado lo que hace es ejercer de relaciones públicas del producto.
Supongamos que nosotros tenemos una publicación de interés para un público muy específico y que para dicho público existe un producto muy interesante. Podemos convertirnos en afiliados de dicho producto, de tal manera que promocionamos el producto desde nuestra web y por cada venta completada desde nuestro sitio recibiremos una comisión
Podríamos explicarlo como los productos cosméticos puerta a puerta. Tú te asocias con el fabricante para vender los productos. El producto no es tuyo, sino del fabricante, y te paga una comisión por su venta. Tanto vendes, tanto te pagan. Eso permite externalizar parte del negocio.
Quien gestiona el canal de afiliación de una empresa es el Affiliate Marketing Manager. Esta es la figura que lleva el programa de afiliación, hace un seguimiento de sus objetivos y controla que el branding empresarial se use correctamente.
Amazon, por ejemplo, utiliza un sistema patentado de afiliación. Si eres afiliado de Amazon y comercializas un producto que te interesa, te paga una comisión derivada del número de ventas que consiga a través de tu enlace. Esto se trackea mediante el enlace que tú facilitas y a través del cuál los usuarios realizan la compra.
El afiliado, normalmente, crea un contenido en el que enlaza el producto y el link directo para que sus usuarios puedan adquirirlo. Gracias a las tecnologías de cookies, el fabricante sabe de dónde ha venido dicho afiliado. Si completa la venta, el fabricante paga al afiliado una comisión por conseguir la venta. Así de simple. La forma puede ser la que deseemos: cupones, revisiones de un producto o recomendaciones, así como contenido patrocinado.
Ventajas del marketing de afiliados
Lo recomendable es vender productos que estén relacionados con tu sector. Si tienes un blog bien posicionado en una temática determinada, lo más lógico es seguir en ese nicho. El producto impactará en el tráfico que tengas. Teniendo esto en cuenta, estas son las ventajas del marketing de afiliados:
- Rentabilidad: Solo se paga cuando se realiza la acción esperada. Se suele emplear CPC, CPL, CPA o CPM. Incluso se considera pagar por revenue share (comisiones).
- Analítica simple: Los programas de afiliados se pueden medir fácilmente mediante métricas.
- Ingresos constantes: Una ves se habilita el sistema, trabará prácticamente solo y de forma automatizada, requiriendo poca interacción por nuestra parte.
- Poco riesgo: No requiere grandes inversiones porque se está promocionando productos de terceros.
¿Qué tipo de marketing de afiliación existen?
Teniendo en cuenta que nos basamos en un modelo básico de tipo anunciante-afiliado-consumidor final, podemos catalogar el marketing de afiliación en varios grupos:
- Páginas web: Posiblemente sea el modelo más tradicional. Aquí los afiliados son los webmasters que vender en sus páginas productos relacionados con su temática.
- Mediante «cash back»: Este modelo se basa en webs que devuelven parte de la comisión por las compras realizadas a través de su sitio (en efectivo, puntos, descuentos, etc.).
- Usando buscadores: Los afiliados logran conversiones mediante anuncios en buscadores (basados en PPC). Aquí el afiliado financia una campaña comprando palabras clave (como en Google AdWords).
- Con bases de datos: Mediante campañas de email marketing en la propia base de datos que tenga el afiliado. El éxito aquí está en la segmentacion y un buen targeting.
- Bases de datos de corregistro: En este modelo los afiliados agrupan varias empresas en un mismo boletín. Los consumidores interesados pueden suscribirse y consienten que sus datos sean utilizados para enviarse a otras empresas en las que se pueda tener interés.
- Redes de afiliación: Estas sirven de intermediarias entre anunciantes y afiliados. Facilitan la relación y proporcionan herramientas para hacer un seguimiento de las ventas y las comisiones.
¿Cómo participar en una red de afiliación?
Supongamos que tenemos una publicación de interés para un público muy específico y que para dicho público existe un producto muy interesante. Podemos convertirnos en afiliados de dicho producto. Promocionamos el producto desde nuestra web y por cada venta completada desde nuestro sitio se nos pagará una comisión.
Para ello tenemos que ponernos en contacto con redes de afiliados o proveedores de servicios para afiliados (ASP). Suelen ser aplicaciones automatizadas que ponen en contacto fabricantes y afiliados, según el interés general. Redes como AWIN, Tradedoubler, Webgains, Lead Dyno, AffiliaXe, Post Affiliate Pro, Versa Marketing son algunos ejemplos. Permiten a todo aquel que quiera vender su producto ponerse en contacto con individuos o agencias dispuestos a comercializarlo. Para lograrlo se usan técnicas como el PPC (pay per click, pago en función del número de clicks).
Así que ya sabes, si deseas unirte a una plataforma de afiliación, busca entre las que recomendamos, compara y lánzate.
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