Lo tienes claro: tu objetivo principal es aumentar la visibilidad de tu marca. Pero te encuentras con que tuiteas, publicas en Facebook o en LinkedIn y lo único que ves son plantas rodadoras del desierto, algún que otro topillo, un lagarto y… cero retuits, cero compartir, cero recomendar.
Pero no te asustes. La culpa no es de tu contenido. Acabas de toparte con la cruda realidad con la que tienen que enfrentarse la mayor parte de marketers. Y es que es muy complicado llamar la atención y conseguir algo de visibilidad de tu marca en un mundo plagado de gente que lucha con fiereza por hacerse con una pequeñísima porción de «atención».
No desesperes. Tu contenido no tiene por qué ser malo. De hecho, el mejor contenido está tapado por los que generan los grandes medios. Y muchos de ellos se «aprovechan» del tuyo. Ha llegado el momento de invertir las tornas, y es la hora de trabajar, trabajar y trabajar. Porque si algo debes tener claro es que para lograr visibilidad hace falta mucho esfuerzo y tesón.
La visibilidad de tu marca se trabaja desde el primer día
Nadie ha llegado a ser conocido de la noche a la mañana (o en todo caso salvo gloriosas excepciones, más relacionadas con la fenómenos virales y sin continuidad). Roma no se construyó en un día, como dicen los anglosajones, y por tanto, tu enorme estructura no se va a crear en 3 meses. La perseverancia, y más en este negocio, es fundamental. Así pues, tu primer objetivo al trazar tu estrategia de visibilidad de tu marca es ser constante.
¿Y qué significa ser constante? Básicamente en algo parecido a esto:
- Publica todos los días algo. Y ese algo debe ser relevante y de temática variada.
- Tus redes sociales tienen movimiento a diario.
- Recomiendas y haces curación de contenidos de otros medios.
Para ser relevante deberás llevar a cabo esas acciones (analizando la mejor combinación de unas o todas), de forma regular, sin cejar en el intento por más que no veas resultados al principio.
En cuanto a los post de tu blog, se recomienda publicar cada día, aunque eso depende del negocio y el público objetivo. Debes analizar tu sector y el público al que te diriges. No siempre publicar más significa obtener mejores resultados. De hecho puede llevar a todo lo contrario. A veces «menos es más». Dependerá de muchos factores.
Este artículo debe superar las 300 palabras (requisito fundamental para que los buscadores lo indexen correctamente). Lo recomendable es que esté en torno a las 500-700 palabras. Cuanto más mejor, pero siempre con valor. Nada de «enrollarte» e irte por las ramas. Lo que se pueda decir en dos palabras, mejor que en cuatro. Sé conciso, pragmático y claro. A Google esto le encanta.
En tus redes sociales deben compartir lo que haces y hacerlo de forma creativa. No esperes que nadie pinche en tu enlace si titulas de forma aburrida. Trata de resolver dudas o hacer preguntas en tus tuits. Y en Facebook nunca seas pesado. Si es sencillo darle al «me gusta», más fácil es aún presionar el «ya no me gusta». Y este paso suele ser definitivo, aunque todo depende de la perspectiva…
Como decía el genio Salvador Dalí: «Que hablen bien o mal, lo importante es que hablen de mí «.
Se consistente
Esto significa que «hazlo, o no lo hagas, pero no lo hagas a medias». Error de principiante: abrir y publicar en tu cuenta de Facebook, Twitter, LinkedIn, Instagram, Quora, Forocoches, Reddit, Tinder (no, por favor)… y dos semanas después tiene treinta tuits. Si seguimos con frases célebres nos viene a la mente esta: «El que mucho abarca poco aprieta».
Enfócate. Piensa dónde se encuentran realmente tus usuarios. Si te diriges a moteros, sal a buscarlos, incluso a la vieja usanza (nada como el contacto directo para cultivar leads). Si tus queridos moteros están en Facebook, concéntrate entonces en esta red social. Si te diriges a los marketers, ve a donde estén. No van a venir a ti al principio, debes de ir tú a por ellos y allanar el camino.
Emplea plataformas especializadas
Al principio valora comprar la visibilidad de tu marca. Para ello Twitter permite promocionar tuits, Facebook posibilita que tus contenidos lleguen algo más lejos si sueltas unos eurilllos (Facebook Ads), y LinkedIn también tiene su propia plataforma de publicidad PPC (¿te suena LinkedIn Ads?). Por tanto, considera promocionar los artículos que más te interese que lleguen lejos.
También puedes crear campañas con la conocida solución Google Adwords. De esta forma tendrás la opción de crear anuncios que aparecerán en un lugar destacado cuando un usuario efectúe búsquedas en Google. Si quieres saber un poco más puedes leer nuestro post sobre por qué anunciarte en Internet y no en los medios tradicionales, o repasar las soluciones Brand Safety que ayudan a reducir el riesgo de aparecer en páginas no deseadas.
Lo mejor es que estas campañas permiten segmentar los usuarios a los que quieras dirigirte, para que solo los que coincidan con tu target los reciban. La visibilidad por lo tanto está mucho más garantizada, aunque .
Dedícale tiempo a los contenidos
Todo esto te permitirá avanzar, pero no basta pagar para aumentar la visibilidad de tu marca. Piensa en qué te hace mejor, qué puedes aportar, en qué eres experto (o quieres serlo). Tienes que pensar en por qué alguien querrá elegir tu marca y no otra.
Llegados a este punto debes tener una programación de contenidos adecuada. Y esta programación debe ser conocida por todos los que escriben en tu medio o blog. Para organizarte puedes emplear soluciones que ayuden a trabajar en equipo como Trello, en donde es posible crear tableros con listas y tareas, que se pueden compartir, y desarrollar conversaciones a modo de chats, adjuntar archivos, establecer tiempos de vencimiento, ver calendarios, etc.
Y no menos importante, conecta, conecta. ¿Crees que hay alguien en particular al que puede interesar tu artículo? ¿Crees que el artículo de la competencia es bueno? Díselo. O menciónales durante tu curación de contenidos, con suerte te cae un retuit. Y este puede ser el principio de una hermosa amistad…
Distribuir contenidos no es solo utilizar las redes sociales
Parece que últimamente todo se reduce a las redes sociales, influencers y SEO. Pero lo cierto es que hay más métodos con los que aumentar la visibilidad de una marca. Por lo pronto puedes hacer campañas mediante mailing para las que existen plataformas muy potentes en el mercado. Desde MailChimp (con una interesante modalidad gratuita) hasta Hubspot o Markitude, entre otras. Con ellas podrás gestionar contactos y leads y hacerles llegar tus mensajes personalizados en forma de newsletters, por ejemplo.
El ROI (retorno por inversión) medio al hacer marketing por correo electrónico es de 38 euros por cada euro invertido (además el 72 % de usuarios prefieren el contacto por email). Esto lo convierte en uno de los canales de marketing más eficaces.
Envía notas de prensa
Y como tu objetivo es dar a conocer tu marca, ¿por qué no presentarte ante los medios de comunicación, tradicionales o no? Al fin y al cabo, éstos siguen siendo, o deberían ser, los altavoces sociales (que me disculpen los YouTubers…). Enviar una nota de prensa es aquí la opción más recomendada, desde donde presentar un producto, sus características, etcétera.
Puedes contactar con periodistas, editoriales, periódicos, magazines, o utilizar una herramienta como Comunicae que justamente hace esto por ti. Esta plataforma online de envío y distribución de notas de prensa cuenta con más de 50.000 receptores entre medios, blogs especializados y periodistas. Utilizándola conseguirás potenciar tu imagen de marca y aumentar tu audiencia.
Recoge lo sembrado: recolecta leads
Una vez hayas medido los KPIs más importantes (como, por ejemplo, de dónde vienen los lectores, cuánto tiempo se quedan en tu web, etc.) y estos sean satisfactorios, lo cual dependerá de tus objetivos, deberás empezar a captar leads.
¿Cómo hacerlo? En las redes sociales prueba a ofrecerles algo a cambio. No estamos hablando solo de concursos, ebooks o vídeos (que está muy bien y está demostrado que consigue resultados). Genera conversación. Haz que hablen. ¿Crees que alguien debería poder comentar tus artículos? Da pie a ello, haz preguntas abiertas, genera controversia, desafía lo establecido. A veces un poco de polémica puede venir muy bien para «sacudir el árbol».
Y si tienes que lidiar a una crisis en la reputación de tu marca, siempre puedes seguir nuestros consejos para prevenirla y actuar en consecuencia.
Así pues, resumiendo, sé constante y consistente. Es la única forma de poder llegar, algún día, a medirte con otros grandes del sector. ¿Todavía no tienes una estrategia de medios adecuada? Ya es hora de empezar a estudiarla. Redundará en mayor éxito para ti y en que la visibilidad de tu marca esté por fin en el sitio que merece. Recuerda que en el grupo de LinkedIn de MarTech Forum podrás compartir todas tus dudas y conocimiento.
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