Existe muchas Páginas web con mal contenido pero es fácil y necesario evitarlo.

Si no sabes de lo que estamos hablando, es tan sencillo como pensar qué haces tú para descargar un contenido de la competencia. Habitualmente, debes rellenar un formulario con tu nombre, apellidos, cargo, empresa, correo y teléfono y te mandan un enlace para descargar ese eBook que te resulta tan interesante.

Pero… ¿deberías hacerlo? ¿Sirve verdaderamente para convertir posibles clientes? ¿Estamos cuestionando desde MarTech Forum uno de los dogmas fundamentales del credo Inbound? En absoluto. De hecho, queremos ofrecerte cinco razones para no hacerlo, y también cuestionarlas para que seas tú el que decida, experimente y mida los resultados.

Poner vallas en tus contenidos, a favor y por qué

Como decíamos, las vallas en los contenidos son una excusa para obtener datos de un lead o posible cliente con el fin de alcanzarlo en campañas posteriores y mantenerle informado. Podemos estar a favor de ellas por las siguientes razones:

  1. Es el único método no invasivo que garantiza contactos de calidad: esto es difícil de negar. Los contenidos de calidad son un imán estupendo para personas interesadas en nuestros servicios y qué mejor forma de obtener los contactos que tanto ansiamos a través de las vallas en nuestros contenidos. Además, es voluntario: si no quieres el contenido no tienes por qué rellenar datos.
  2. Permite nutrir posibles clientes que de otra forma no podríamos: si alguien llega y se descarga nuestro contenido, se lo lee y le gusta, puede estar muy bien, pero no podremos medir si ha convertido. En cambio, si nosotros vamos liberando información poco a poco hacia ese cliente que posiblemente esté buscando información, sabremos en qué momento preciso ha podido convertir, y podremos ir convenciéndolo poco a poco.
  3. Nuestros contenidos cuestan tiempo y dinero, qué menos que pedir algo a cambio: verdad difícil de refutar. El marketing de contenidos no es económico si está hecho con amor. Por tanto, lo normal es que queramos algo del cliente por nuestro tiempo, aunque no sea una compra. Los datos corporativos del mismo, son, por tanto, la perfecta moneda de cambio por nuestro tiempo y esfuerzo.
  4. No solo sirven para obtener clientes sino para generar conciencia de marca: así es, una vez acabada la campaña podemos informar a nuestros posibles clientes de quiénes somos y darles más información. No se acaba el mundo en la campaña.
  5. Nos permite obtener datos valiosísimos de demografía: podremos saber el perfil de nuestro posible cliente medio para construir una buyer persona adecuada, y saber a quién estamos apuntando con precisión. Solo por esto poner vallas en tus contenidos se convierte en algo imprescindible.

Vas a leerte el informe definitivo de una marca y no es más que un pastiche muy mono de un conjunto de datos deslavazados, unidos en un PDF de… ¿10 páginas?

Por qué no deberías poner vallas en tus contenidos, la visión opuesta

Drift ha levantado una buena polvareda con este post, en el que ha destacado que «hemos dejado de tratar a las personas como personas, para hacerlo en términos de posibles clientes». Y por ello nosotros hemos ideado cinco razones para no tener vallas en los contenidos.

  1. Existe un exceso de contenido: Drift apunta en la buena dirección, apenas el 1% de nuestros posts recibe más de 8 compartidos, y es cierto. Nos hemos empeñado en una loca carrera por el contenido sin tener en cuenta que hay personas detrás leyendo lo que escribimos.
  2. Hay más formas de medir quién nos lee que pidiendo registro: el software de analítica está lo suficientemente avanzado como para identificar posibles clientes sin molestarles, y existen nuevas técnicas que permiten «asaltar» posibles clientes que ya han vuelto varias veces a nuestro sitio sin requerir su correo.
  3. Rara vez nuestro contenido es de valor y no se justifica el vallado: te habrá pasado más de una vez, vas a leerte el informe definitivo de una marca y no es más que un pastiche muy mono de un conjunto de datos deslavazados, unidos en un PDF de… ¿10 páginas? Entonces es cuando juras y perjuras que jamás volverás a descargarte un PDF, pero vuelves a hacerlo. Muchas veces no se justifica poner tantas complicaciones para algo de tan poco valor añadido.
  4. Hay otros medios que funcionan mejor: Snapchat, Instagram, Telegram, WhatsApp… están empezando a despegar para hacer marketing. ¿Por qué concentrarnos tanto en el correo electrónico? Podemos hacer incluso que te puedas descargar el contenido en el móvil y leerlo desde ahí. ¿Qué sentido tiene entonces poner vallas en tus contenidos?
  5. Los leads seguirán llegando porque seguirá habiendo gente interesada en tu marca:  Si empiezas a tratar a tus posibles clientes como personas y no como billeteras andantes, lo más seguro es que puedas concentrarte en hacer cosas de calidad, en vez de estar buscando la forma de atrapar a tus clientes para obligarles a convertir.

¿Con qué paradigma te quedas? Es complicado decidir, ¿verdad?

Si estás a favor de poner vallas en tus contenidos, participa, y si es al contrario, también. ¡Todo sea por el bien del marketing!