Curación de contenidos es una de esas palabras que a alguno le recuerda a meter nuestros contenidos dentro de un almacén y dejar que cojan solera, pero no trata de eso.
La curación de contenidos trata más sobre cómo seleccionar los contenidos de forma que podemos usarlos para tres cosas:
- Proveer a nuestros usuarios de contenido de calidad: si estamos navegando constantemente en internet, leeremos muchos temas interesantes, y aunque sean de la competencia, seguro que a nuestro público le interesan.
- Contar con temas de los que poder hablar: la fuente de la eterna creatividad no existe. La creatividad consiste en coger de aquí y allá y hacer algo nuevo con ello. La inspiración es necesaria para poder crear.
- Conocer las tendencias actuales del mercado: de qué se habla, de qué no se habla, qué enfoque se le da a las cosas, en definitiva, todo lo relacionado con el trabajo de campo.
No obstante, nuestra curación de contenidos puede fallar, ya que no es un proceso que deba hacerse en un día, sino durante todos los días, todo el año. ¿Cómo empezar a curar contenidos sin caer en los vicios de siempre?
La Creación de Contenidos WEB se hace todos los días
Lo bueno de curar contenidos es que no es necesario dedicarle ocho horas al día, ya que bastará con 20 minutos diarios de navegación. Si lo multiplicamos por cinco de nosotros, contaremos con más de 2 horas semanales dedicadas a buscar contenidos para nuestros clientes, y para saber hacia dónde se dirige el mercado. Y si cada miembro del equipo lo hace, 5 personas en una semana pueden trabajar como una sola dedicada todo un día a ello.
Podemos usar diferentes herramientas para curar los contenidos. Existen herramientas específicas para esta tarea, pero muchas veces es mejor utilizar las que ya tenemos y las más simples.
La newsletter de los medios que más nos gusten: no podía ser más sencilla. Llega a tu correo, a la misma hora el mismo día, con un resumen de la información. Lo que sucede es que muchas veces de cada 10 piezas solo nos interesan dos, por lo que es mejor seguir menos newsletters de medios muy buenos que muchas newsletters de otros medios más del montón. Prioriza seguir a aquellos medios que publiquen poco que aquellos que te inunden el correo.
Las redes sociales: un punto de curación de contenidos interesante, así como los medios que desde ahí publican. Desde hace un par de años Twitter puede notificarnos en el móvil si un editor ha publicado una información, pero sigue adoleciendo del mismo problema que las newsletters, el exceso de contenido.
Agregadores de noticias o lectores RSS: probablemente, la mejor solución. Feedly o Thalamus, Menéame o Reddit, pueden servirnos para esta tarea. Feedly nos permite agregar RSS a nuestro timeline, Digg hace lo mismo, y Thalamus solo te muestra noticias relacionadas con el mundo de la publicidad y del marketing. En cambio, Menéame o Reddit nos muestran lo que más publican las personas de cualquier tema, aunque podemos elegir el mismo simplemente dándole a un filtro.
Recomendaciones de influencers: hay miles de influencers en redes sociales y suelen publicar una gran cantidad de contenido que podemos tener en consideración para compartir o inspirarnos. Es conveniente seguir a todos los que consideremos que pueden aportarnos contenido interesante, naturalmente huyendo de aquellos que solo floodean o que no publican contenidos de calidad.
Finalmente, para hacer más sencilla la tarea de análisis del contenido, una buena idea es utilizar Google Docs para que todo nuestro equipo vaya colgando ahí los enlaces interesantes de las cosas que ha visto en internet. Utiliza una hoja de cálculo con fecha, titular, enlace y resumen de lo que trata para saber qué es. Y luego tú eliges si deseas publicarlo o no. Al mantenerse actualizado, es fácil ir completándolo poco a poco.
Esto solo es una forma de estrategia de curación de contenidos. Seguro que a ti se te ocurren otras que puedes compartir aquí con nosotros. Y tú, ¿cómo lo haces?
Deja tu comentario