La tendencia del uso y adopción de la tecnología del marketing hace de LinkedIn una importante herramienta para segmentar audiencias, clasificar públicos objetivos, conectar con profesionales del entorno, dar a conocer key messages de startups y/o organizaciones, como a la vez se perfila como el medio más idóneo para «posicionar marca personal».
Si bien el objetivo de la presencia en LinkedIn radica en el hecho de la interconexión entre profesionales de un mismo sector para generar sinergias, conocimiento compartido y «hasta sabiduría de las masas digitales», la reciente [y vertical] necesidad laboral de destacar en el entorno, ha hecho de esta red un espacio creativo para desplegar una sólida reputación online en torno a un «conjunto de palabras claves” hilvanadas a un sujeto.
Cuando un perfil profesional sobresale sobre el resto de su entorno, su perfil se convierte en una referencia para el resto de “sus amistades”, porque el alcance de su currículo junto a sus publicaciones inciden en el alcance de su marca personal en Google, otras redes sociales y plataformas interactivas.
Ahora bien, una vez contextualizada la keyword “posicionar marca personal” en LinkedIn, es importante resumir los 3 factores que desplazan el “personal branding” al siguiente estadio, y no es otro sino la relevancia social y prestigio del profesional que le sirve de aval para conseguir nuevas oportunidades laborales:
- El individuo intersado en “posicionar marca personal” a través de la red social LinkediIn necesita orientar su perfil profesional a una —Keyword Profesional—, la cual se debe entender como el “qué hace se hace, cuál es el elemento diferenciador sobre competidores, y cómo se prepara para los nuevos desafíos».
- Aunque en la actualidad los estudiosos y analistas del SEO no han llegado a un punto de acuerdo sobre como tratar a la “keyword profesional”, la observación participante sobre el uso y adopción de LinkedIn deja entrever que los perfiles más exitosos en la propia red [y en Google] son los que reflejan en su hoja de vida una keyword constante en headline, descripción, denominación de la url, formación académica y experiencia profesional. El mejor ejemplo para ilustrar este apartado sería aquel “guionista” que se presenta a si mismo como guionista de ciencia no ficción y toda su vida laboral-académica resaltan los tags “guión” o “guionista”.
- Por último, y desde el punto de vista académico, es importante desmentir que los perfiles que mejor se indexan en Google son los que más postean, tienen conexiones, o comparten-comentan publicaciones de terceros; ya que las pruebas de usabilidad y adopción de contenido que he llevado a cabo revelan que no importa la densidad de una cuenta de LinkedIn para posicionar marca personal, ya que los seguidores son indicadores externos para la audiencia, y el verdadero motor de visibilidad yace en la relevancia de un perfil en un segmento geográfico puntual.
En conclusión, se debe enfatizar que si bien el LinkedIn puede acelerar el posicionamiento de una marca personal en Google, ésa labor hay que dejarla para la última instancia, ya que lo más faena dará se esconde debajo de la ardua labor de “encontrar la keyword profesional» donde debe anidarse el Curriculum para destacar en la audiencia donde le gustaría evolucionar.
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